©Pavlin Nadvorni
Si hay algo que he aprendido entrevistando a los participantes del Global Solo Challenge (GSC), es que estos marineros aman y respetan al mar.
Uno de ellos es el participante búlgaro Pavlin Nadvorni. quien se enamoró de los barcos, del mar y de la navegación cuando apenas tenía ocho años.
Desde entonces, su vida ha girado en torno a los barcos, navegando en windsurf, en barcos de vela ligera, en one-toners y, hasta, en superyates de ricos y famosos. En más de 45 años, Pavlin ha navegado más de 200.000 millas náuticas.

En 2003, después de varios años viajando por el mundo, Pavlin decidió que había llegado el momento de “echar racies” y se estableció, con su esposa y su hija (y posteriormente su hijo), en la hermosa ciudad costera de Varna en la costa del mar Negro, en Bulgaria, y allí creó su propio negocio, Black Sea Yacht Service Ltd.
Su empresa se dedica a la correduría, entrega de yates, alquileres, reparaciones y mantenimiento de todo tipo de embarcaciones y, aunque emplea a varias personas, parece que cualquier trabajo que implique salir a navegar a menudo es el propio Pavlin quien lo lleva a cabo.
En asociación con la Academia de Navegación Cor Caroli, Pavlin también se dedica a entrenar a jóvenes navegantes y tiene varios barcos en los que les enseña, llevándolos desde novatos hasta miembros completamente capacitados de una tripulación de regatas.

Con este fin, hace unos años, Pavlin compró un barco en Gales que había sufrido, a raiz de una tormenta, graves daños mientras estaba fondeado en Holyhead. Era un Farr 45, llamado ‘Espresso Martini’, que había navegado extensamente en Nueva Zelanda y el Reino Unido.
Todavía podía navegar, pero tenía un daño significativo en el costado de babor, donde había una zona de deslaminación. Pavlin sabía que le hubiera salido muy caro repararlo en el Reino Unido, así que, después de un período de negociación, compró el barco y decidió repararlo en su propio astillero.
Increíblemente, Pavlin y su tripulación navegaron hasta Bulgaria a pesar de que el costado de babor se iba flexionando debido a la falta de soporte y además sin poder utilizar el camarote de ese mismo lado.

Fue durante ese viaje, y con el barco en esas condiciones, que Pavlin y su tripulación se tuvieron que enfrentar a una tormenta mediterránea con vientos de hasta 60 nudos. De todas formas, nos comenta que se sentía seguro ya que sabía que el compuesto de kevlar utilizado en la fabricación de este barco habría resistido y efectivamente lo hizo (en este momento de la entrevista empecé a estar de acuerdo con la mujer de Pavlin que dice que está un poco loco).
Espresso Martini ha sido reparado y utilizado tanto para entrenar como para competir en el mar Negro y el mar Egeo. De hecho, Pavlin y su tripulación superaron su propio récord de travesía del mar Negro (un récord que habían mantenido durante 31 años).
El año pasado, en 2022, Pavlin recibió el “Golden Globe” de la Fundación de Navegación Car Caroli de Bulgaria (que es una entidad separada de la Academia de Navegación Car Caroli). Se trata de un prestigioso premio búlgaro.
El éxito de su negocio y la propiedad de Espresso Martini brindaban a Pavlin la oportunidad perfecta para participar en el GSC y, considerando que una oportunidad como esta no se le presenta a muchos marinos, no se la hizo escapar.
Siempre tuvo el sueño de intentar una circunnavegación en solitario y sin escalas, para él, esta hazaña, es su Everest personal.
Si bien Espresso Martini esta diseñado para la navegación de altura, no está diseñado para la navegación en solitario y, de hecho, ha requerido algunas modificaciones para cumplir con los requisitos de la Categoría 0.
Pavlin decidió realizar la navegación de calificación en solitario de 2.000 millas náuticas del GSC a finales del año pasado.

Inicialmente, Pavlin quería realizar este viaje en el mar Negro, pero considerando la continua inestabilidad en la región, decidió ir hacia el sur, a través del estrecho de los Dardanelos, hacia el mar Mediterráneo y luego regresar a Varna.
Pavlin partió al día siguiente de una gran regata en la que había competido con su equipo, y admite que no estaba especialmente bien preparado. También admite que la navegación estaba lejos de ser ideal como ejercicio de entrenamiento para el próximo GSC, ya que había mucho tráfico marítimo en la zona en ese momento, y no pudo desarrollar un régimen adecuado de sueño y descanso.
En la actualidad, Pavlin, junto a su equipo, está llevando a cabo todos los trabajos necesarios de Espresso Martini, pero también tiene que completar el mantenimiento y las reparaciones rutinarias para sus clientes habituales, así como preparar los barcos para la próxima temporada de alquiler.
Pavlin asegura que tendrá el barco listo con tiempo de sobra y que, con calma y tranquilidad y junto a su tripulación, llevará Espresso Martini hasta A Coruña mucho antes de su fecha de salida.

El barco, como dije, es un barco de 45 pies diseñado por el famoso diseñador australiano/estadounidense Bruce Farr. El diseño es típico de Farr con popa baja y ancha, lo ideal para surfear grandes olas. Un hecho que Pavlin puede atestiguar después de haber navegado en varias de ellas cuando fue sorprendido por la tormenta mediterránea.
Una característica de este barco es su gran y sensible rueda de timón. Pavlin había pensado en sustituirla por una caña, pero finalmente decidió dejarla ya que resulta sumamente práctica para agarrarse en mares agitados, de todas formas llevará una caña de repuesto por si acaso.
Por último, le pregunté a Pavlin acerca de su mensaje social. Afirma que esto es algo que todavía está considerando. Sin embargo, se siente ya muy orgulloso de poder ser un ejemplo para inspirar a nuevos y jóvenes navegantes búlgaros a aficionarse a este deporte, especialmente porque señala que aparte haber ganado una edición de la regata transatlántica a dos TWOSTAR, Bulgaria ha tenido muy pocos éxitos en el deporte de la vela.
