Gestión de eventos sostenibles: la GSC colabora con TÜV Thüringen Italia

Para abordar las implicaciones, en materia de sostenibilidad, que conlleva la organización de un evento global, la Global Solo Challenge colabora con TÜV Thüringen Italia que validará el cumplimiento por parte de la organización de la Norma ISO 20121 y emitirá la certificación después de haber llevado a cabo las revisiones oportunas.

Los eventos deportivos pueden tener un impacto muy positivo en las comunidades locales que los acogen. Dentro del mundo de la vela, muchas regatas de altura de renombre se han desarrollado a lo largo de los años, convirtiéndose en oportunidades para las empresas, para la industria del turismo y la hostelería y para esas marcas que buscan una visibilidad global.

Sin embargo, un impacto económico y social positivo de un evento va de la mano con el consumo de recursos y la producción directa o indirecta de residuos y emisiones de carbono. Desde hace ya dos décadas, la industria de los eventos se ha dado cuenta de la necesidad de prácticas más sostenibles.

De hecho, David Stubbs, Director de Sostenibilidad de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Londres 2012, buscó una manera de hacer valer las promesas hechas sobre la sostenibilidad durante la candidatura a los Juegos de Londres. Esto llevó a la creación de la «BS 8901:2007 Especificaciones para un sistema de gestión de eventos sostenibles con orientación para su uso». Poco después se creó la Norma ISO 20121.

«Para la Global Solo Challenge, la sostenibilidad ha sido un aspecto de primordial importancia desde su lanzamiento. Centrándonos en prácticas reales con implicaciones inmediatas más bien que en posibles logros futuros. Nunca hemos hecho declaraciones de sostenibilidad ambiental o social que no pudiéramos probar fácilmente. Cuando TÜV Thüringen Italia se puso en contacto con nosotros y nos ofreció revisar nuestra organización y emitir la certificación ISO 20121, nos alegramos mucho y nos mostramos muy interesados«, comenta el organizador del evento Marco Nannini.

«Nos pusimos en contacto con la Global Solo Challenge porque, en materia de sostenibilidad, tiene un formato que la distingue de otros eventos. No nos extrañamos al descubrir de que no se trataba de una coincidencia. Estamos deseando estudiar las elecciones y los procesos de gestión implementados por la organización, y esperamos poder certificar todos los esfuerzos, en el ámbito de la sostenibilidad, llevados a cabos por el evento«, comenta Giovanni Marmini, Director de Desarrollo de Negocios de TÜV Thüringen Italia.

ISO 20121 (nombre completo: ISO 20121:2012, Sistemas de Gestión de Eventos Sostenibles – Requisitos de orientación para su uso) es un estándar internacional voluntario para la gestión de eventos sostenibles, creado por la Organización Internacional de Normalización. La norma tiene como objetivo ayudar a las organizaciones a mejorar la sostenibilidad en todo el ciclo de gestión del evento.

La ISO 20121 es adecuada para todos los tamaños y tipos de eventos. Las organizaciones pueden demostrar la conformidad voluntaria con la norma ISO 20121 mediante una autodeclaración, mediante la confirmación por las partes interesadas en la organización o, mejor aún, mediante la certificación por una tercera parte independiente, por ejemplo, un organismo de certificación.

El desarrollo de la norma ISO 20121 ha llevado a la implementación de un sistema de gestión con el fin de celebrar eventos más sostenibles. Proporciona un marco de ayuda para identificar los impactos sociales, económicos y ambientales potencialmente negativos de los eventos. Los organizadores pueden eliminar o reducir dichos impactos negativos a través de una mejor planificación de los procesos. Esto conduce a mejoras en aspectos clave de sostenibilidad, como la selección del lugar, el transporte, el reciclaje o la reutilización de los residuos de demolición, la creación de una estrategia alimentaria sostenible, la promoción de una vida sana, la creación de competencias y empleo, y el crecimiento del negocio.

Todos los eventos tienen impactos económicos, sociales y medioambientales. Por lo tanto, las especificaciones en materia de sostenibilidad son relevantes para todos los miembros de la cadena de suministro de la industria de eventos: organizadores y administradores de eventos, constructores de estands, proveedores de catering y logística.

La norma ISO 20121 puede reducir los costes, las emisiones de carbono y los residuos. Ayudar a gestionar mejor la biodiversidad de los lugares y lograr una fuerza laboral diversa e inclusiva. Las especificaciones también incluyen una guía práctica sobre la comunicación, la planificación y el control operativo, la identificación y el compromiso de las partes interesadas, la gestión de la cadena de suministro y de las adquisiciones.

Consideraciones adicionales para eventos náuticos

Al hablar de eventos náuticos, una preocupación estrictamente relacionada con dicho sector es la sostenibilidad de la industria de la construcción de barcos. A pesar de que los organizadores (de la regata) no son directamente responsables del impacto ambiental de la construcción de un nuevo yate, el formato de cada regata determina la necesidad de encargar un nuevo barco de regata para obtener una ventaja competitiva.

Muchos operadores del sector afirman haber avanzado mucho en el desarrollo de materiales de construcción sostenibles. Por ejemplo, algunos se centran en el uso de fibras naturales. Sin embargo, esto no necesariamente aborda la cuestión de la reciclabilidad al final de la vida útil de los compuestos reforzados con resina. Las resinas bio epoxi de última generación permiten disolver las resinas y extraer las fibras al final de la vida útil de un barco. Sin embargo, las fibras de carbono o de vidrio no suelen reciclarse sino que se reutilizan, lo que significa que simplemente se está retrasando el problema final de la acumulación de residuos en los vertederos. Parece que hay algunas fibras alternativas que podrían conducir a una economía totalmente circular de los materiales de construcción de embarcaciones. Sin embargo, su viabilidad financiera aún queda por ser demostrada.

Los organizadores de la Global Solo Challenge han decidido adoptar un enfoque más sustancial en este asunto. El innovador formato del evento, con salidas escalonadas, crea un desincentivo implícito a participar con barcos nuevos. El «bonus» edad introducido en la formula utilizada para determinar los grupos de salida hace que inscribirse con barcos más viejos sea una opción atractiva. La prolongación de la vida útil de los veleros existentes es sin duda alguna la mejor opción para reducir el impacto ambiental.

El formato está pensado también para reducir significativamente el presupuesto necesario para participar, apostando para una sostenibilidad financiera a largo plazo. Con el tiempo, algunas regatas han visto los costes dispararse, disminuyendo la inclusión e inevitablemente creando eventos de élite solo para profesionales.

En la Global Solo Challenge, los participantes pueden elegir, según sus preferencias, entre una amplia gama de yates admitidos, sin crear una situación en la que solo puedan participar diseños específicos o incentivar a construir barcos nuevos. Además, este formato flexible, no excluye aquellos propietarios que ya poseen un velero construido o comprado por circunstancias no relacionadas.

Asimismo, el reglamento del evento prevé un límite en el uso de combustibles fósiles. Los patrones deben equipar sus barcos con sistemas de energías renovables que funcionen en cualquier condición climática, como generadores eólicos, paneles solares, generadores hidroeléctricos y pilas de combustible de bioetanol.

Los patrones que participan en el Global Solo Challenge son todos armadores de sus propios barcos. La autosuficiencia es esencial. Los participantes deben llevar ellos mismos sus veleros al puerto de salida en La Coruña por vía marítima.

La organización se compromete a crear oportunidades de trabajo inclusivas y reducir su huella de carbono optando por un equipo de gestión global que trabaje, siempre que sea posible, de forma remota, así disminuyendo el impacto de la logística.

Las implicaciones que conlleva la elección del formato son muchas y de largo alcance, el resultado es un proyecto sostenible tanto a nivel económico como social y medioambiental.